Statista Consumer Insights: Niveles de popularidad del vapeo en todo el mundo

El consumo de vapers ha experimentado un notable aumento en los últimos años, especialmente en algunos países que lideran el mercado mundial. Según el informe de Statista Consumer Insights, plataforma de datos y estadísticas que ha realizado un estudio sobre el uso de los vapers en diferentes países, Indonesia, China y Estados Unidos son los países con mayor proporción de consumidores de vapes

En este artículo analizaremos las principales causas y efectos del incremento del consumo, basándonos en los datos de las encuestas realizadas por Statista a unas mil personas por países y otras fuentes relevantes. Los usuarios que se entrevistaron pertenecen al grupo etario entre 18 y 64 años. El periodo analizado comprende los meses de enero a marzo de 2023. 

También veremos cómo se regulan los vapes en diferentes regiones y qué desafíos plantean para las autoridades sanitarias y los fabricantes.

Según el informe de Statista Consumer Insights:

• Indonesia, China y Estados Unidos son los tres países con mayor número de usuarios de vapers, con un 25%, 16% y 15% respectivamente del total global.
• Países como Reino Unido, Canadá, Italia y Francia le siguen en la lista con porcentajes entre el 13% y el 9%.
• Los factores que explican este incremento son diversos, pero se pueden destacar algunos comunes a estos países, como la regulación legal, la oferta de productos, la publicidad y el precio.

¿Cuáles son los países que reflejan mayor tendencia global al alza del vapeo? 

El informe de Statista Consumer Insights también revela cuáles son los países con mayor proporción de usuarios de cigarrillos electrónicos en el mundo. Según los datos recogidos en 2023, Indonesia, China y Estados Unidos se colocaron a la cabeza. Les siguen países como Reino Unido, Canadá, Italia y Francia, con porcentajes entre el 13% y el 9%. 

A continuación, te mostramos algunos de los resultados que reflejan la tendencia global al alza del vapeo, que se prevé que continúe en los próximos años.

1. Indonesia: el país con más vapeadores del mundo

Indonesia es el país donde más se vapea en el mundo, así lo indica Statista. Según este estudio, el 62% de los adultos indonesios ha usado un vape al menos una vez en el último año, lo que representa un incremento del 15% respecto al año anterior. 

En ese país, el 76% de los hombres y el 4% de las mujeres fuman cigarrillos tradicionales, lo que supone un grave problema de salud pública. Ante esta situación, muchos fumadores indonesios buscan alternativas para reducir o dejar el hábito del tabaco. Una de ellas son los vapers.

“En Indonesia, una de cada cuatro personas encuestadas por Statista Consumer Insights afirmó haber utilizado un vapeador al menos ocasionalmente”.

Analicemos, entonces, por qué Indonesia lidera el ranking mundial del vapeo. Hay varios factores que explican este fenómeno, entre ellos:

• La cultura del tabaco. Indonesia es uno de los países con mayor consumo de tabaco del mundo, con una tasa de prevalencia del 33,8% según la Organización Mundial de la Salud (OMS). El tabaco forma parte de la identidad cultural y social de muchos indonesios, especialmente de los hombres. El vapeo se ha presentado como una opción para dejar de fumar o reducir el consumo de tabaco, aunque no hay evidencia científica suficiente que respalde esta afirmación.
• La falta de regulación. Indonesia no tiene una legislación específica sobre el vapeo, lo que permite la venta y el uso de estos productos sin restricciones ni controles sanitarios. Los vapeadores pueden adquirir los dispositivos y los líquidos en tiendas físicas o en línea, sin límite de edad, advertencias sanitarias ni impuestos. Además, no hay una prohibición de vapear en lugares públicos, lo que favorece la exposición pasiva al vapor.
• La influencia de la industria. La industria del vapeo ha encontrado en Indonesia un mercado potencial y ha invertido en campañas de marketing y publicidad para promover sus productos. Algunas de las estrategias utilizadas son el patrocinio de eventos musicales y deportivos, el uso de influencers y celebridades, la creación de comunidades y clubes de vapeo y la oferta de variedad y personalización de los dispositivos y los líquidos.
• La percepción social. El vapeo se ha asociado con una imagen moderna, joven y rebelde, que atrae a muchos indonesios que buscan diferenciarse o pertenecer a un grupo. El vapeo también se percibe como una forma de expresión artística, mediante la realización de trucos y figuras con el vapor. Además, el vapeo se considera como una actividad placentera y relajante, que ofrece sabores y aromas diversos.

2. China: el mayor productor y consumidor de vapers de Asia

Según un informe de Statista, China es el país que más produce y consume estos dispositivos en el continente asiático. El informe revela que China produjo el 90% de los vapers a nivel mundial en 2019, con un valor estimado de 8.500 millones de dólares. Además, se espera que el número de usuarios de cigarrillos electrónicos en China alcance los 64,3 millones en 2021, lo que representa el 62% del total de usuarios en Asia.

Los motivos que impulsan el crecimiento de este mercado en China son diversos. Por un lado, la mayor conciencia sobre los riesgos del tabaquismo para la salud ha llevado a muchos fumadores a buscar opciones menos perjudiciales. Por otro lado, la innovación tecnológica y el desarrollo de nuevos productos han atraído a los consumidores con diferentes sabores, diseños y funcionalidades.

Sin embargo, el sector de los cigarrillos electrónicos también enfrenta algunos desafíos y regulaciones en China. Por ejemplo, en 2019, el gobierno chino prohibió la venta online de cigarrillos electrónicos y restringió su publicidad, con el fin de proteger a los menores de edad y prevenir el consumo excesivo. Asimismo, algunas ciudades como Shenzhen y Hangzhou han prohibido el uso de vapes en lugares públicos.

A pesar de estas limitaciones, el informe de Statista pronostica que el mercado de los cigarrillos electrónicos en China seguirá creciendo en los próximos años, impulsado por la demanda interna y las exportaciones. Se estima que el valor del mercado alcanzará los 28.700 millones de dólares en 2024, lo que supondrá un aumento del 237% respecto a 2019.

3. Estados Unidos: el país con más controversia sobre los vapes

Los vapes se han popularizado en los últimos años como una alternativa al tabaco tradicional, pero también han generado una gran polémica sobre sus posibles efectos en la salud y el medio ambiente. Según un informe de Statista, Estados Unidos es el país con más controversia sobre los cigarrillos electrónicos, ya que tiene el mayor número de noticias negativas relacionadas con estos productos en los medios de comunicación. 

Entre enero y septiembre de 2019, se publicaron más de 2.000 artículos que mencionaban los riesgos o problemas de los vapes en Estados Unidos, frente a 600 en Reino Unido, 400 en Francia y 300 en Alemania.

Ante esta situación, las autoridades sanitarias y políticas han tomado medidas para restringir o regular el uso y la venta de vapers en Estados Unidos. Por ejemplo, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) ha prohibido desde febrero de 2020 la comercialización de cartuchos con sabores distintos al tabaco y al mentol, para reducir su atractivo entre los menores. Asimismo, varios estados y ciudades han establecido impuestos, límites de edad o prohibiciones totales o parciales sobre estos productos.

Sin embargo, también hay voces que defienden los beneficios potenciales de estos dispositivoscomo una herramienta para dejar de fumar o reducir el daño del tabaco. Según un estudio realizado en 2019 por investigadores del Reino Unido y publicado en la revista New England Journal of Medicine, los vapers fueron más efectivos que otros métodos como parches o chicles para ayudar a los fumadores a abandonar el hábito. 

Además, algunos expertos sostienen que los riesgos asociados a vapear son menores que los del tabaco convencional, que causa más de 480.000 muertes al año en Estados Unidos.

4. Reino Unido: el país con más apoyo a los vapers como herramienta para dejar de fumar

El 62% de los británicos considera que los dispositivos de vapeo son una forma efectiva de reducir o eliminar el consumo de tabaco, frente al 37% de la media mundial. Además, el 29% de los británicos cree que los vapes son menos dañinos que los cigarrillos convencionales, mientras que el 23% piensa que son igual de dañinos y el 19% que son más dañinos.

Estas cifras contrastan con las de otros países como Estados Unidos, donde solo el 43% de la población ve a los cigarrillos electrónicos como una alternativa al tabaco y el 33% los considera más dañinos que los cigarrillos. O con las de España, donde el 51% de los españoles opina que los vapes son igual o más dañinos que el tabaco y solo el 21% los ve como una forma de dejar de fumar.

“Al desglosar el estudio por grupos de edad, el 27% de los jóvenes de entre 18 y 19 años afirmaron utilizar un vapeador ocasionalmente, la cifra más alta con diferencia de todos los grupos de edad encuestados en el Reino Unido” —planteó Statista.

¿A qué se debe esta diferencia de actitudes hacia los vapers? Una posible explicación es que Reino Unido ha adoptado una política más favorable hacia estos dispositivos, basada en la evidencia científica y en la promoción de la salud pública. De hecho, el Servicio Nacional de Salud (NHS) recomienda a los fumadores que quieran dejar el hábito que utilicen los vapes como ayuda, siempre bajo supervisión médica y combinándolos con otros tratamientos.

Además, las autoridades sanitarias británicas han regulado el mercado de los cigarrillos electrónicos para garantizar su calidad y seguridad, limitando la cantidad de nicotina y otros ingredientes que pueden contener. También han prohibido la publicidad engañosa y la venta a menores de edad, así como el uso de vapers en lugares públicos cerrados.

Estas medidas han contribuido a crear una cultura del vapeo responsable y a reducir el escepticismo y el miedo entre la población. Según un estudio del King’s College de Londres, el uso de los vapes ha ayudado a más de un millón de británicos a dejar de fumar entre 2011 y 2017. Además, se estima que hay unos tres millones de vapeadores en Reino Unido, de los cuales el 54% son exfumadores y el 40% son fumadores que intentan dejarlo.

5. Canadá: el país con más preocupación por el consumo de vapers

Canadá es uno de los países donde el uso de cigarrillos electrónicos ha crecido más en los últimos años, especialmente entre los jóvenes. Según un informe de Statista, el 13% de los canadienses de entre 18 y 64 años consumieron estos dispositivos en 2023. 

En Canadá, existe una ley federal que regula la fabricación, venta, etiquetado y promoción de los productos de vapeo, llamada Ley de Productos de Tabaco y Vapeo. Esta ley establece que los productos de vapeo:

• Deben tener un aviso de salud que advierta sobre los riesgos de la nicotina y la adicción.
• No pueden contener ingredientes que puedan causar daño a la salud, como vitaminas, cafeína o sustancias que imiten el efecto del cannabis.
• No pueden tener sabores que puedan atraer a los jóvenes, como los dulces, los postres o las bebidas energéticas.
• No pueden tener envases o etiquetas que puedan confundirse con alimentos, bebidas o cosméticos.
• No pueden publicitarse en medios de comunicación o lugares donde puedan ser vistos por menores de edad.
• No pueden venderse a menores de 18 años (o 19 o 21, según la provincia o el territorio).

Además de la ley federal, cada provincia o territorio puede tener sus propias normas sobre el consumo de vapes en lugares públicos, el impuesto sobre estos productos o la educación y prevención sobre sus efectos en la salud.

6. Italia: el país con más impuestos sobre los vapes de Europa

Es el caso de Italia, que se sitúa como el país con el impuesto más alto sobre los líquidos para vapear de toda Europa, según un informe de la Asociación Europea de Vapeo Independiente (IEVA). Según este estudio, el impuesto italiano sobre los líquidos con nicotina es de 0,4 euros por mililitro, lo que supone un 80% del precio final del producto. Esto significa que un vapeador italiano paga unos 12 euros por una botella de 30 mililitros de líquido, mientras que en otros países como España o Francia el precio ronda los 6 euros.

Según los expertos, hay varios factores que influyen en la decisión del gobierno italiano de gravar tanto a los cigarrillos electrónicos:

• Por un lado, está la presión de la industria tabacalera, que ve en el vapeo una amenaza para su negocio y que cuenta con una gran influencia en el país. 
• Por otro lado, está la necesidad de recaudar fondos para hacer frente a la crisis económica y sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19, que ha golpeado duramente a Italia.
• Y por último, está la falta de evidencia científica sobre los efectos del vapeo en la salud, que genera incertidumbre y precaución entre las autoridades sanitarias.

Sin embargo, este impuesto no ha impedido que Italia sea uno de los países donde el vapeo se ha hecho popular. Según la Asociación Italiana de Vapeadores (ANAFE), hay unos 2 millones de vapeadores en Italia, lo que representa el 4% de la población adulta. Además, hay unos 3.000 puntos de venta especializados en productos para vapear, que generan unos 300 millones de euros al año.

7. Francia: el país con más diversidad de usuarios de vape

Según Statista, Francia ocupa el séptimo lugar de los países encuestados, con un índice de popularidad del 9 %.  Este dato reafirma los resultados de un estudio realizado por la Universidad de París y publicado en la revista Addiction, donde se plantea que Francia es el país con más diversidad de usuarios de vape en Europa, con un 7,7% de la población adulta que los utiliza al menos una vez al mes. 

Los investigadores de la Universidad de París entrevistaron a más de 12.000 personas de 12 países europeos, y analizaron las características sociodemográficas, los hábitos de consumo y las motivaciones de los vapeadores

Los resultados mostraron que Francia es el país con más usuarios regulares de vapes (3,8%), seguido por el Reino Unido (2,6%) y Alemania (1,8%). Además, Francia es el país con más diversidad de perfiles de usuarios, ya que incluye tanto a exfumadores como a fumadores actuales, y tanto a personas que usan vapers con nicotina como sin ella.

Los autores del estudio señalan que esta diversidad se debe a varios factores, como la disponibilidad y el precio de los vapers, la regulación legal, la percepción social y la información sobre sus riesgos y beneficios. Asimismo, destacan que los vapes pueden tener un papel importante en la reducción del tabaquismo, ya que pueden ayudar a los fumadores a dejar el hábito o a reducir su consumo. 

8. Alemania: el país con más resistencia al cambio de los cigarrillos a los vapes

En Alemania, el país con más fumadores de la Unión Europea, el uso de cigarrillos electrónicos no ha logrado despegar. En el estudio de Statista, se colocó en el puesto octavo con un 7 % de popularidad. Por su parte, un estudio de la consultora Euromonitor International, el mercado alemán de los cigarrillos electrónicos solo representa el 2,4% del total europeo, muy por debajo de países como Reino Unido (29,4%), Francia (16,9%) o Italia (9,4%).

Los expertos señalan varios factores que explican la baja penetración de los vapes en Alemania, entre ellos:

• La falta de regulación específica. A diferencia de otros países europeos, Alemania no ha establecido un marco legal claro para regular la venta, el consumo y la publicidad de los cigarrillos electrónicos. Esto genera incertidumbre entre los consumidores y los comerciantes, que no saben a qué normas atenerse ni qué garantías tienen.
• La desinformación y el escepticismo. Muchos fumadores alemanes desconocen los beneficios potenciales de los vapers para reducir el riesgo de enfermedades relacionadas con el tabaco, como el cáncer o las afecciones respiratorias. Además, existe una percepción negativa sobre la seguridad y la calidad de estos productos, alimentada por noticias falsas o exageradas sobre sus posibles efectos adversos.
• La cultura y la tradición. Fumar es una práctica muy arraigada en la sociedad alemana, que forma parte de su identidad y su estilo de vida. Los cigarrillos son vistos como un símbolo de libertad, rebeldía y placer, mientras que los vapes son percibidos como una moda pasajera o una imposición externa. Muchos fumadores se resisten a abandonar el hábito o a sustituirlo por otro que consideran menos auténtico o satisfactorio.

Estos obstáculos dificultan la transición de los cigarrillos a los vapes en Alemania, pero no la hacen imposible. Algunas medidas que podrían favorecer el cambio son:

• Crear una legislación específica que regule los aspectos sanitarios, fiscales y comerciales de los cigarrillos electrónicos, siguiendo las directrices de la Unión Europea y las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
• Promover campañas de información y educación que difundan los beneficios de los vapers para dejar de fumar o reducir el consumo de tabaco, así como las evidencias científicas que respaldan su seguridad y eficacia.
• Fomentar la innovación y la diversificación del mercado de los cigarrillos electrónicos, ofreciendo productos de calidad, variados y adaptados a las preferencias y necesidades de los consumidores.
• Respetar la libertad y la elección de los fumadores, sin imponer prohibiciones ni restricciones excesivas que limiten su acceso o su disfrute de los cigarrillos electrónicos.

9. Brasil entre los países de menos popularidad del vapeo

En la encuesta de Statista, Brasil se encuentra entre los países de menos popularidad del vapeo. Solo el 6 % de los encuestados en línea dijeron que usaban un vapeador al menos ocasionalmente.

El vapeo en Brasil está regulado por la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), que desde 2009 prohíbe la comercialización, importación y publicidad de los dispositivos electrónicos para fumar. Sin embargo, esta prohibición no ha impedido que el mercado ilegal crezca y que muchos consumidores accedan a los productos de vapeo por internet o en tiendas clandestinas.

Los motivos que llevan a los brasileños a vapear son diversos, pero según un estudio realizado por la Universidad Federal de São Paulo en 2020, los principales son: dejar de fumar (39%), reducir el consumo de tabaco (25%), probar algo nuevo (16%) y seguir una moda (9%).

El perfil de los vapers brasileños también varía según el tipo de dispositivo que utilizan. Según un informe de Periodico de Ibiza, los vapes desechables son los más populares entre los jóvenes de 19 a 22 años, que buscan sabores variados y una experiencia sencilla y económica. Los vapes recargables son los preferidos por los adultos de 25 a 34 años, que quieren controlar la cantidad de nicotina y personalizar su dispositivo. Los vapes avanzados son los más usados por los mayores de 35 años, que buscan una mayor producción de vapor y una mejor calidad.

El futuro del vapeo en Brasil es incierto, ya que depende de las decisiones políticas y sanitarias que se tomen al respecto. Por un lado, hay sectores que abogan por una mayor regulación y fiscalización del mercado, para evitar el consumo ilegal y proteger la salud pública. Por otro lado, hay sectores que defienden el derecho a vapear como una opción personal y una herramienta para dejar el tabaco.

Lo que está claro es que el vapeo es una tendencia que no pasa desapercibida y que genera debate tanto entre los consumidores como entre los expertos.

10. Marruecos: el país menor popularidad del vapeo

Según Statista, Marruecos es el país con menos popularidad del vapeo. El informe se basa en el porcentaje de adultos que declararon haber usado un cigarrillo electrónico o un dispositivo similar en los últimos 30 días.

De acuerdo con los datos de Statista, solo el 2% de los adultos marroquíes habían vapeado, lo que sitúa a Marruecos en el último lugar del ranking, por detrás de países como Alemania (7%) y Brasil (6%). Hay varios factores que pueden influir en esta tendencia, como la cultura, la legislación o el precio. 

Por un lado, Marruecos es un país mayoritariamente musulmán, y el islam prohíbe el consumo de sustancias que alteren la mente o el cuerpo, como el alcohol, las drogas o la nicotina. Aunque algunos musulmanes consideran que el vapeo no entra en esta categoría, otros lo ven como una forma de tabaco y lo rechazan por motivos religiosos.

Por otro lado, Marruecos tiene una legislación restrictiva respecto al vapeo. Desde 2014, está prohibida la importación, la fabricación y la comercialización de los dispositivos electrónicos de vapeo y sus accesorios. Además, está prohibido usarlos en lugares públicos cerrados. Estas medidas buscan proteger la salud pública y prevenir el consumo de nicotina entre los menores de edad. Sin embargo, también dificultan el acceso al vapeo para quienes quieren dejar de fumar o reducir su dependencia al tabaco.

Finalmente, el precio también puede ser un factor determinante. Según un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de 2019, el precio medio de un paquete de cigarrillos en Marruecos era de 21 dirhams (unos 2 euros), mientras que el precio medio de un dispositivo electrónico de vapeo era de 500 dirhams (unos 46 euros). A esto hay que sumar el coste del líquido y los recambios. Por tanto, el vapeo puede resultar demasiado caro para muchos marroquíes, especialmente para los que tienen bajos ingresos.

Los vapes han ganado popularidad, y las estadísticas no mienten

Los resultados de la encuesta de Statista avalan diversas investigaciones que plantean que los cigarrillos electrónicos han ganado popularidad a nivel mundial y que la tendencia internacional es al alza. Esto indica que hay una creciente demanda de alternativas al tabaco tradicional, que puede estar motivada por razones de salud, económicas o sociales.